13 de marzo de 2011

27 DE FEBRERO

Después de pasarnos unas cuantas horas en Barcelona, hemos cogido nuestro segundo avión a Doha (Qatar), viajando con Qatar Airways. Nuestro  avion supermoderno, con los asientos con mucho espacio y con ordenador para cada pasajero con peliculas para escoger, juegos, música, etc..
Aqui en Doha todo es superlujo y en el duty Free del aeropuerto hemos visto unos cochazos enormes (un audi r8 y otro todo terrano enorme. En los escaparates se podían ver joyas grandes de oro. Tienen expuesto un audi r8 que no veas y lo lamento por Pau pero he visto fotos del barça.
Hemos visto árabes vestidos todos de blanco, los tipicos arabes del petróleo y las mujeres de negro con niqab, esa prenda toda negra que sólo deja ver los ojos. a mí eso me da muy mala milk, y sólo me pasa por la cabeza lo que deben pensar esas mujeres cuando nos ven a nosotras. Es cierto que si desconocen que existe otra vida no puedan pensar en ella pero son mujeres que viajan y conocen otro mundo.... Qué fuerte.
 Aun nos quedan 4 horas a Delhi y estamos cansadas a mi espalda le está costando resistir. son demasiadas horas sentada.
A ver cuando puedo volver a escribir. Un beso a todos





12 de marzo de 2011

28 DE FEBRERO

Hemos llegado cansadas, las seis horas de vuelo de Barcelona a Doha me mataron la espalda y luego con el cambio de hora sólo hemos dormido unas dos horitas.Como hemos llegado a las 8 de la manana, nos hemos duchado y en marcha!

La mujer de atrá lleva un bebé!



Hasta mañana no tenemos guia asi que hemos ido solitas por aqui. Como estamos muy cerca de la Plaza Connaugh nos ha parecido que podríamos ir a dar una vueltecita. Por la mañana ha ido muy bien porque hemos cogido un rickshaw que nos ha acompañado de compras por todo. De todas formas hemos pasado por la primera "broma" de los indios que nos decían que había una manifestación como las que está habiendo en Libia y que era mejor no ir al mercado central, ese que me apetecía tanto ver.



Subiendo al Rickshaw

Me he comprado un traje punjabi que es de esos que llevan las indias con pantalon debajo y que no hay que confundir con el saree, que sólo son 8 metros de tela envueltos de manera que hacen una falta con un pañuelo que pasa por todo el cuerpo. Me lo he llevado puesto y parecia una india, con los ojos y el pelo moreno. Seguro que a ellos les gustaba porque tengo la tez bastante pálida y a las indias eso les gusta mucho.






He comprado unas cuantas cosas más y luego pensaba que no me hacen falta, pero también sigo "moviendo" el dinero que tengo y "soltando" mi seguridad.



Casi no hay turistas y los indios son como  moscas que hay que quitarse de encima porque encima te quieren verder cosas todo el tiempo o quieren que les cojas un taxi o un rickshaw..



El caos circulatorio es total. Como nuestro hotel está céntrico hemos ido a comer a un buen restaurante de la Plaza Connaught (Coffe ..). Yo me he comido un curry de verduras y mi compi uno de pollo Thai. Todo el mundo nos asusta con el tema de las comidas pero si vamos a buenos restaurantes yo no creo que nos pase nada.


Barbero en la calle




Al final no hemos ido al mercado, nos hemos quedado en el hotel a descansar y esperar mañana nuestro primer día con guía. Yo hubiera seguido toda la tarde pero mi compi está cansada del avión, que sólo hemos dormido dos horitas, y le he hecho caso.

11 de marzo de 2011

1 DE MARZO

Capitulo siguiente:

Hoy ha amanecido bastante nublado y frío y parecía que íbamos a tener un día bastante feo, pero luego se ha arreglado. La temperatura cambia muchísimo cuando se nubla el cielo. Mi desayuno, continental: unas frutas y pan tostado y bollos. Mi compi se ha dedicado a comenzar a probar las comidas indias en el desayuno. Es una atrevida.
Hoy hemos conocido nuestro guía: se llama Deepak, que significa "Luz". El dice que todos los nombres indios significan algo. Claro, nos ha preguntado nuestros nombres y el mío , pues no significa nada. Pero era algo que él ya sabía. Como estábamos esperando el chófer, que había cambiado a última hora porque al nuestro se le había muerto la madre, intenté comenzar la conversación preguntando cosas sobre India. La primera cuestión, al decirnos su nombre, fue decirle: "Deepak, ¿como Chopra?", y él entonces con gran orgullo dijo: "Sí, pero él es de los "Sutra", la cuarta casta, y yo soy de los sacerdotes, de la primera casta. Encontences él comenzó a preguntarnos cuanto ganaba Chopra y se reía en plan irónico.... pero bueno, nos dijo que seguiríamos hablando de castas y de la India durante el viaje, y no insistimos.
Al cabo de media hora llegó el minibus con el chófer y un adolescente que le acompañaba. Le preguntamos cuántos éramos en el grupo y nos dijo que sólo dos personas más y nosotras. El porqué estuvo relacionado con la crisis en España.
Fuimos a buscar a la otra pareja que resultaron ser un médico (Jordi) y su mujer (Dolors), una pareja de unos 60 años con dos hijas. ¿Qué bien, pensé, si me pasa algo tengo a un doctor....!
Hemos visitado Delhi. Nos jabían hablado del caos pero ha sido mucho peor. A parte de la conducción temeraria, hay mucha suciedad por todo. Ni qué decir de los bazares, que son otro caos. Hemos podido fotografiar a cinco personas en una moto y las fotos típicas de Internet con mogollón de cables colgados, barberos en la calle y monos conviviendo con vcas y personas (supongo que también con ratas...).



En algo me recordaba Marruecos y Egipto y en algún momento me parecía estar allí. Sin embargo Marruecos o Egipto al menos estan mucho mas ordenados y limpios. Aqui hay desde vendedores de parachoques de segunda mano hasta comida en la misma acera...
Hemos comido muy bien, en un restaurante de lujo. Cuando le hemos comentado a Deepak donde habíamos comido el día anterior otra vez se reía de forma irónica y orgullosa, como si sólo él supiera los sitios buenos para comer. Yo estoy segura de que el que habíamos probado el día anterior estaba muy bien, pero él insistía en que los que salían en la guía Lonely Planet eran pagados por los dueños. Por supuesto yo no le creí. Sé que esas cosas pasan pero la guía perdería todo su valor si sólo indicara lugares por los que ha cobrado.De momento la comida nos ha sentado bien.

La última residencia de Ghandi

El guia me está empezando a molestar un poco. Como se dice aquí: "parece que no tiene abuela", todo lo suyo es mejor y él sabe de todo y él lo hace todo bien. Se pasa el día hablando de dinero y también del yoga. Nos ha dicho que él es maestro de Yoga y que tiene unos amigos en Barcelona (Doctores de mucho dinero....) que le han invitado a pasar 3 meses en España y que él puede dar clases de yoga, etc, etc...un poco rollo siempre hablando de dinero y de yoga. En un momento dado me he dado cuenta de que en el fondo yo estaba haciendo lo mismo que él, aunque en silencio. En el fondo lo estaba despreciando porque yo me creía mejor.



Pero la cuestión es que nos comentaba que haciendo yoga uno podía curarse el cáncer, y cuando Jordi oigo esto, le dijo: "Pues es una putada que no nos digáis cómo, y la gente se pueda curar..." asunto zanjado. No se volvió a hablar del tema.

Hemos visto el Qutub Minar, que son unas ruinas donde antes hubo un gran conjunto de templos. En la Puerta de la India había un montón de Indios de picnic. Estábamos hablando de la suciedad del lugar cuando desde un autobús una mujer nos lanza un paquete (de bebé) que roza nuestras cabezas. Nos quedamos alucinadas. el lugar estaba lleno de puestecillos con dulces y azucar de algodón de un rosa fucsia impresionante. Por supuesto nos dijeron que no probásemos nada, y así lo hicimos.




Visitamos la gran Mezquita de Jama Masjid, la más grande de la India, y que habíamos visto unos días antes en un documental de la India. Nos disfrazamos para entrar con una capa. Y digo nos disfrazamos porque dentro había un montón de personas que no llevaban la dichosa capa. Yo llevaba una mochila debajo y de repente se reunieron a mi alrededor un montón de mujeres sonrientes. No entendía qué estaba pasando hasta que Deepak me dijo que se creían que llevaba un bebé detrás. (Sí hubieran sabido mi edad....) Por cierto, todo el mundo se creía que yo era más joven. No por mi aspecto sino porque elllos parecen mucho mayores de lo que son, supongo que por el estilo de vida que tienen.
Visitamos la última casa donde vivió y murió Gandhi. Deepak era muy escéptico con todo lo que se dice de él, diciéndonos que él había estudiado Historia y sabía otra versión, sin embargo no nos habló de ella y se limitó a explicarnos lo que se cuenta. Entre líneas dedujimos que lo consideraba un corrupto a él y a sus discípulos y que hoy aún permanecen en el Gobierno luchando por sus propios intereses.

Cocina Sikh




A mí lo que me pareció un montaje fue visitar esa casa-museo, toda lujosa, con enormes jardines impecables, sabiendo que la gente se muere de hambre fuera. Yo pensaba que si él lo hubiera sabido (que se mantendría un museo así) no lo habría querido. Pero tal vez sí quería pasar a la historia de esa manera. Eso yo nunca lo sabré.


Después también fuimos a ver su mausoleo y lo mismo de lo mismo...tanto lujo, tanto jardín impecable....
Más tarde y para acabar el día visitamos el templo Sikh Gurdbara Bangla Sahib. Deepak nos habló de un poco de ellos (son los que llevan turbante y no se pueden cortar el pelo) y visitamos el comedor social que tienen y donde dan de comer a 15.000 personas al día gratis, según ellos. Visitamos la cocicna descalzos, con toda la mugre que puede haber en una cocina de esas dimensiones y pudimos practicar haciendo nans (el pan indio). Me pareció increíble que pudieran hacer tanta comida, no por el trabajo ni las ollas enormes que tenían, sino por lo que puede suponer en dinero, que Deepak nos dijo provenía de gente adepta con mucho dinero. Ojalá esto existiera quí. De todas formas, pensar que 15.000 personas comen allí supone que hay muchísimos pobres.



Las abluciones Sikh en lugar retirado para mujeres

Al salir del templo me he fijado en un Sikh que llevaba una espada y he visto claramente como las religiones son sirven de excusa para vivir, como un refugio para no enfrentarnos a nuestra vida. Tal vez también sea una parte de mí cuando hablo de espiritualidad.
Por la tarde hemos visitado otro palacio real y mausoleos, dentro del mismo estilo que Amber.
Después un bonito templo Hindú donde acudían muchos indios a rezar a Vishnú (creo). Por cierto, ahora que lo recuerdo, voy a nombrar las nueve encarnaciones de Vishnú, según nos contaron: 1 en pez, 2 en tortuga, 3 en jabalí, 4 mitad hombre mitad león, 5 en un hombre bajito y negro, 6 en Vishnú, 7 en Rama, 8 en Krishna y 9 en Buda y queda por venir el 10º, Kalki.


Chandni Chow

Bueno, eso nos lo iban contando todo el tiempo, al mismo tiempo que nos decían que los hindús tienen 33.000.000 de dioses, porque todo es igual de importante en la vida: las flores, los animales, las piedras, las personas, etc.... y habían calculado así por encima, que hay 33.000.000 de cosas.
También nos explicó que hay tres dioses principales: Vishnú, Brahma (el Dios creador al que nadie le reza, y aún no sé por qué razón) y el tercero? de momento no me acuerdo.
Lo último ha sido visitar el Chandni Chow, que es su mercado. Por supuesto un caos total, gente, coches, rickshaws, bicicletas, vacas, claxons.... y todo el mundo de arriba abajo. Mi compi dice que le parece como si todo el mundo tuviese que estar haciendo algo. Yo más bien lo veía como si hubiese un montón de gente deambulando o parada sin hacer nada.
Deepak nos dice que aunque en la India haya pobres, todos sonríen porque saben que su situación se debe a algo que han hecho en sus vidas pasadas pero que ya les llegará un mejor momento.. Yo no puedo creer que alguien se pueda conformar de esta manera.

Por el momento India no me parece nada espiritual. Veo a la gente muy metida en sus vidas mundanas y sus supersticiones y rituales. De todas formas me estoy dando cuenta de lo orgullosa que soy y de que muchas veces no discuto las cosas porque creo que estoy en posesión de la verdad y no vale la pena. ¡Qué horror!
Con mis reflexiones sobre la pobreza y el contraste del lujo que he vivido, nos volvemos al Hotel. Mañana tenemos un día de mucho viaje.

10 de marzo de 2011

2 DE MARZO

Me he pasado la noche con dolor de tripa y náuseas. Al final diarrea y régimen. He vuelto a mi desayuno continental, pero esta vez de régimen, y mi compi a sus beans y comida india. Hemos llenado el estómago para el viaje.


4 L: Land, Love, Live

De camino a Samode Deepak no ha parado de hablar. Esta vez explicando el tema de las castas, que yo creía prácticaemente abolido, y que él dice que prácticamente lo está, pero que en el fondo sigue rigiendo sus vidas. Nos ha hablado de que su hermano se enamoró de una chica de otra casta y que quería casarse con ella pero al final su madre no le dejó porque no le gustaba su familia y él chico, airoso, decidió irse de casa. Eso para ellos es una enorme afrenta. Supone que nunca más podrá ver a su familia y su madre le ha borrado del mapa, como si no tuviera hijo. Deepak nos ha dicho que ahora mismo se pueden relacionar entre castas pero que es mejor casarse con alguien de su casta, que los matrimonios siguen siendo en su mayoría concertados por los padres y que eso implica que serán felices, porque la familia se esmera en encontrar a la mejor pareja.




Se ve que hacen reuniones de familias para hablar de sus respectivos hijos, luego los hijos se ven unas horas y deciden si hay posibilidad de matrimonio (¡sólo unas horas). Si la respuesta es afirmativa (porque la pareja es guapa y tiene educación y dinero) entonces los "novios" tienen un plazo de dos meses para conocerse y confirmar la decisión de matrimonio.

Exterior del Palacio de Samode
Nosotros le decíamos que no entendíamos el matrimonio sin amor y su respuesta fue que si alguien se casaba por amor, luego el amor desaparecía... y en cambio así, el amor aprecía después del matrimonio. Bueno, creo que en realidad ni él se lo creía. Yo pensaba: "Si él supiera que en nuestro mundo estamos luchando por la abolición de los matrimonios concertados!".
Luego nos habló de su propio caso, que se había enamorado de una chica de la universidad, que era hija de Sikhs. Su madre le dio permiso para casarse pero el padre de la chica no se lo dio a ella así que a ella la casaron con otro hombre y Deepak tuvo un desamor tan grande que decidió no casarse nunca. ahora entendí el comentario que nos hizo ayer sobre la torre  de Qutub Minar donde los chicos se tiraban "por amor". Se refería a que cuando se enamoraban de alguien con quien no podían casarse se tiraban de la torre para morir.


Por otra parte también está su hermano, que quiso casarse con una chica que no le gustó a su madre, a pesar de ser de su misma casta, y el chico se ha tenido que ir de casa.
Llegamos a Samode.Mi primera diarrea. Y eso que hoy comemos en un palacio espectacular. Es un palacio de esos también tipo moro, con patios y fuentes y cortinas al viento, pintado de amarillo. Otra vez lujo por todas partes.... Me como un arroz blanco y un plátano. Mi compi sigue disfrutando de la comida india.
El guía sigue caharlando, y presumien do de su país, de los informáticos que ganan 10.000€ al mes (no se lo cree ni él) y luego, por lo bajín, cuando le hemos preguntado porqué había tantos niños en la calle, nos cuenta que el 40% no está escolarizado. Y se me ponen los pelos de punta!




Una siestecilla en el minibús y llegamos a Jaipur. Como ya es casi de noche, nos vamos al hotel. El nuestro bonito y sencillo y el de nustro compañeros, que van de "super lujo", otro palacio de aquellos que tiran para atrás.
Me doy cuenta de que en el fondo, y aunque muy sutilmente, el guía trata mejor a nuestros compañeros de viaje que a nosotras. Aunque por supuesto ninguna queja de él.

Palacio de los vientos
No me atrevo a cenar nada por miedo a seguir con la diarrea así que bajamos sólo a dar una vuelta por el hotel y en la piscina exterior nos encontramos un grupo de japoneses que están viendo un espectáculo de danza india y nos aprovechamos de la situación para disfrutar también de ella.


En la piscina queda un hombre con un teatro de marionetas que habla muy bien español y nos pide que nos quedemos a hablar con él para poder practicar. Empezamos una conversación y nos regala dos marionetas. Yo ya veo que las tendremos que comprar pero al final la blanda de mi compañera se queda con las dos de regalo y dos que le compramos. La conversación empieza a ponerse caliente cuando nos pregunta si sabemos lo que es el Kama sutra y si los hombres españoles lo practican igual que los indios. Lo encuentro empalagoso y entrometido y decidimos huir...

9 de marzo de 2011

3 de marzo

Sigo desayunando tostadas y yogur. No quiero arriesgarme a ponerme peor.
Nos llevan temprano al Fuerte Amber porque tenemos que hacer la ascensión (que al final dura unos 5 minutitos) en elefante. Todo un monteje turístico, por supuesto, y empiezan las compras ambulantes, regateos y NO; NO; NO.... pero al final siempre te endosan algo.











Elena me dijo: "llévate una maleta grande para poder comprar muchas cosas, que ellos viven de eso y les haces el favor" y yo me voy con esa filosofía y pienso: "bueno, sólo son dos euros...." y así vamos multiplicando euros y sitio en la maleta.


Aunque ya no está habitado, el fuerte es otro de los numerosos ejemplos de lujo.
acabada la visita nos vamos a visitar Jaipur. Primero una ojeada al Palacio de los vientos y luego un paseo en bicishow (un hombre pedaleando una pesada bicicleta con dos personas de pasajeros) por el mercado. Me parece estar en el norte de Africa, con sus colores, sabores, etc... Me siento contenta con tanta animación de mercadillos. Compramos dos cosillas y de nuevo al hotel.
Como tenemos tiempo libre me he decidido a darme un masaje de reflexoterapia. Tengo que ir al Spa cruzando la piscina y me vuelvo a encontrar el tipejo de las marionetas que insiste en que volvamos para hablar con él y seguir practicando, pero no me apetece nada.

Después del masaje (muy bien, por cierto) mi compi y yo nos vamos a dar una vueltecilla por el hotel, esquivando al susodicho, y luego a descansar, que mañana volvemos a tener muchas horas de carretera.

8 de marzo de 2011

4 de Marzo

Mi compi se ha levantado más ronca que los demás días. Està así desde el primer día pero hoy parece que peor. Ella dice que es de la polución y no para de toser. Como tampoco de comer y probar platos indios....
Templo de los Monos
La primera decepción del día ha sido pasar por un "Monasterio del Mono". Bueno, en realidad era un monasterio hindú, en medio de un pareje desierto, dedicado al dios Mono (Hanuman), un mono del cual son muy devotos en general.
El lugar, sucio como todo lo demás, estaba bastante destartalado, lleno de monos por todas partes y de palomas que han dejado el lugar sucio y abandonado a su suerte. Eso sí, una señora barria (movía la basura de un lado a otro) y se quejaba de la suciedad que las personas dejaban al dar de comer a los monos.
Es es otra de las incongruencias: no tienen casi para comer pero los monos están todos bien alimentados.
Se supone que ese monasterio se había erigido allí porque "de repente había surgido agua de no se sabía donde" y lo encontraban un sitio sagrado. Yo creía que las personas que viven en el campo saben que el agua surge de fuentes subterráneas, pero a ellos les había parcido un milagro.
Dentro, una pequeña presa donde la gente se baña para purificarse (y la verdad es que no sé si se purifican o se van peor de lo que estaban).
Arriba de todo (porque hace como una pequeña colina), la parte más antigua del monasterio donde un santón hace un pequeño ritual, nos pone el punto sobre la frente y un cordel atado a la muñeca. Yo lo llamaría montaje turrístico pero al ver como reaccionan los indios, que también pasan por el montaje, creo que forma parte de todo ese repertorio de rituales supersticiosos de los indios.

Barbarroja
 Y aquí me pararé para insistir sobre todo el tema de la superstición (que no espiritualidad). Se ponen el punto rojo porque es sagrado, les pintan a los niños los ojos negros para quitarles el mal de ojo, se bañan para purificarse o purificar los pecados de sus antepasados (los sikhs), llevan cordeles en el cuello o dentro del cuerpo, tocan los iconos cuando pasan por delante, pintan los animales de naranja antes de comerlos (el naranja es sagrado), tocan campanas junto a los iconos para advertir al dios de turno que les esuche, etc.... pero sólo lo hacen para pedir (pedir ser librados del mal de ojo o pedir cosas buenas). Yo a eso lo llamo superstición.
Quería comentaros una cosa curiosa. Durante el camino vi muchos hombres con el pelo de color naranja y le pregunté al guía. Me dijo que se teñían el pelo con henna para no parecer tan mayores con las canas y que las mujeres también lo hacen, Pero la verdad es que parecen zanahorias...
Mujeres cargando
Por el camino hemos visto algún centro de yoga y meditación y puede que en esos lugares la cosa sea diferente. De todos modos recuerdo también grandes montajes como el de Osho, que aprovechando la superstición, la devoción y la idea de que todo en la India es espiritual, no hace más que beneficiarse personalmente.
Lugares como la escuela de La Madre (por la cual pasamos por delante en Delhi), quedan totalmente inadvertidas para el verdadero Buscador.
La siguiente parada ha sido en Fatehpur Sikri. Me recordaba mucho el Palacio Imperial de Beijing. Enormes explandadas de piedra roja sin nada de nada. Edificios de piedra roja vacíos. Deepak nos cuenta a menudo que los ingleses expoliaron todos los palacios incluso arrancando el oro de algunas paredes y techos.
Fatehpur Sikri
De nuevo tengo la sensación de "cuanto lujo para unos pocos" porque el fuerte es enorme, con salas para las concubinas, para Akbar, que fue quien lo construyó, etc... con paredes de relieves...y unos jardines todos cuidadísimos.
El camino hacia Agra ha resultado "reverdecedor", con los campos a punto de la siega y la gente que parece tranquila y a su modo feliz. Deepak dice que querrían vivir en la ciudad pero yo los veo, ahí en su campo, y en algún modo los envidio, a pesar de la posible suciedad, a pesar de no tener mucho...
Hemos comido en un restaurante en el campo, después de rodar contradirección en la autopista (cosa muy corriente). He aprovechado y aunque sigo con el régimen, me he comido un arroz al azafrán y un nan dulce (supongo que relleno de dátiles y algún fruto seco). También me he aficionado a los banana lassi, que soy batidos de yogur con plátano y se los recomiendan a los guiris. Desde luego sólo los tomo en lugares certificados para guiris.
Mirad los andamios...
De pronto hemos llegado a Agra. Lo que antes me había parecido sucio, ahorra me ha parecido un vertedero. Las calles están invadidas de vertederos donde hay gente buscando comida o qué se yo. Olor terrible. Nos dicen que hay mucho Dengue y que hay que ir con cuidado y ponerse mucho repelente. Me entra el pánico porque fuera del microbús todo es tan horrible que me parece que me va a dar algo. Se me vuelca el corazón.
Deepak nos había comentado que la entrada al Taj Mahal cuesta 20€ por persona y si lo multiplicamos por los millones de personas que lo visitan, es un dinero más que considerable. ¿No podrían gastar una mínima parte en limpiar?
La llegada al hotel me choca pero la entiendo. Es como un búnker con muchas tiendas y bares donde no se pueden abrir las ventanas por miedo a los mosquitos. Huele por todo a repelente.
No me han querido dar una cuenta de acceso a internet para el Ipod, dicen que sólo puede ser para portátiles. No entiendo porqué pero la cuestión es que me ha quedado claro que sin inglés y sin portátil o teléfono con 3g no puedes comunicarte, si no es pagando y con problemas.

7 de marzo de 2011

5 de Marzo

La Vedette
Por la mañana hemos visitado el Taj Mahal. La verdad es que el monumento es precioso, pero yo no lo considero digno de un pueblo que está viviendo en la miseria. La mayoría de los visitantes eran indios, seguramente del Sur, que visitan ese Templo como símbolo del amor que se puede tener a una persona.
En realidad parece que lo construyó un emperador para su mujer fallecida. La idea es que ella le había dicho que lo que más deseaba en este mundo era algo que el emperador no le podía ofrecer: Ir al paraíso cuando muriese. Y lo que hizo él fue construir ese templo a semejanza del paraíso (según el Corán).
Se ve que estaba tan obsesionado con el tema que quiso construir uno igual pero en negro, al otro lado dl río pero su hijo, para que no despilfarrara todo su dinero, construyó el fuerte rojo, cercano, y lo encerró allí. Vueltas da la vida!
Vedette con búfalo
Ha sido curioso ver como los indios nos fotografian a nosotras. En el fondo es lo mismo que nosotras, que les fotografiamos a ellos.
En el recinto del Taj Mahal no se puede entrar más que la cartera y una botella de agua. La razón es que la gente no tire basuras y al mismo tiempo no entre bolis para que no escriban en las paredes. Pues bien, la gente escribía en una puerta metálica (menos mal que no era sobre la piedra) y las botellas vacías andaban tiradas por los rincones. Desde luego que son sucios!
El recinto tienen un hermoso jardín con el nombre de los árboles y hemos visto la "acedera" de la cual Deepak nos recortó un trozo y nos dijo que curaba la diabetes y con la rama se hacía un cepillo de dientes que los deja muy blancos. También nos habló del Betel, que es uno de los árboles sagrados de la india.
El Taj Mahal desde Fuerte Rojo
Luego visitamos el Fuerte Rojo donde encerraron al Emperador. Más de lo mismo, un lugo y grandiosisda prescindibles.
En la comida Deepak tenía cara de susto y cuando le preguntamos nos dijo que le asustaba un gato que estaba por ahí merodeando porque "los gatos se comen a los niños". Nos reímos de él y le decíamos que debía confundirse con un tigre...
Familia de la India
Nos quedaban tiendas por visitar, por supudesto, así que fuimos a una marmolería y luego a una tienda de instrumentos musicales donde Deepak pretendía cantarnos una canción mientras alguien tocba la cítara. menos mal que la persona en cuestión estaba ocupada y no pudo ser. De todas formas hay un video colgado en internet que se llama "deepak cantando". Deepak nos dió la paliza durante todo el viaje cantando. Nos explicó que su ilusión era ser cantante y que se estaba preparando con un profesor para hacer su debút el año que viene. Canta canciones tradicionales y modernas de Bollywood de esa manera que tienen los indios moviendo una mano... Nos pidió que le tradujéramos la letra de una canción y no vas qué cursi. Decía algo así como: "tiraré mis ojos en la carretara para verte cuando pases". Nos dijo que la quería cantar en España cuando fuera allí y nosotros lo imaginábamos cantando esas canciones y todo el mundo se reiría de él.
Por la tarde nos propuso ir a visitar un centro de la Madre Teresa y me encantó, porque creía que iba a ver mucha miseria pero era un remanso de paz y color, con jardines y todo impecable. Tienen personas sin hogar y dementes y también niños huérfanos. Un niñito sonriente de unos dos añitos se me colgó de los brazos y menos mal que no me lo podía llevar porque hubiera tenido un gran dilema.
Antes de ir a cenar y despedirnos de nuestros compañeros de viaje, que no seguían al día siguiente con nosotras primero fuimos a una joyería y luego al cine. A la joyería ya íbamos con la idea de que no íbamos a comprar nada pero mientras miraba los anillos de plata, ya me liaron. Consiguieron que me llevara un anillo de aguamarinas por el que pagué un precio irrisorio. Incluso creo que esta vez no ganaron nada porque el guía, que les conocía por supuesto, insitió muchísimo para que me rebajaran el anillo y al despedirse les dijo algo así como que "algunas veces es necesario ceder..." Ellos se disculpaban e intentaban hacerme saber que era una pieza especial porque las aguamarinas eran de muy buena calidad, de una calidad que normalmente sólo se engasta en oro... y yo disculpándome por pedir un precio tan barato pero es que yo no tenía ninguna intención de comrparme un anillo....  como lo que pasa en las rebajas, que te llevas cosas que no necesitas.
Bueno, pues luego el cine,sí, a un cine en hindi a ver una película de Bollywood. Creo que todas son muy parecidas y tratan de las bodas concertadas. Lo mejor fue que estuvimos sentados en la última fila de un cine moderno como los de aquí pero en unos butacons enormes que se convertían en camas. Dentro del cine, la gente gritaba hablando por el móvil, los chiquillos lloraban, gritaban y corrián como si estuvieran en su propia casa...
He cenado pan con pan. Ya stoy un poco aburrida

6 de marzo de 2011

6 de Marzo

Palacio de Orcha
Después de la despedida de ayer de nuestros compañeros de viaje, hoy el guía nos ha dejado en la estación de tren de Jhansi, para ir hasta Orcha y de ahí a Kahurajo donde mañana cogeremos un avión a Varanasi (Benarés).
El muy listo nos ha dejado con otro guía (dentro del tren) para no tener que viajar con nosotras y poder volverse a Delhi con la pareja que nos acompañaba. Pero la verdad es que tampoco era necesario que viniese con nosotras. En el tren he reconocido a tres mujeres con las que hemos coincidido en varias visitas. Supongo que hacen el mismo trayecto que nosotras. El tren, de superlujo, según el guía, era un tren normalito para nosotras, aunque reconozco que para ellos, que semontan sobre los tejados y van colgando, debe ser una pasada.
En la mesa que teníamos, había un montón de periódicos y hemos podido observar todo un apartado dedicado a "contactos para bodas". No veas, un montonazo de anuncios de personas con su casta, sus estudios y su poder adquisitivo, buscando personas para casarse. Todo un mundo.






Frente a nosotras había una abuelita con una niñita de unos 6 añitos. Durante todo el viaje la abuelita animaba a la niña y luego nos hemos enterado, por los llantos de la niña al llegar a Orcha, que la iban a dejar en un internado. Nuestro guía de Orcha nos ha explicado que allí hay muchos buenos colegios con buena fama y que dejan a los niños y niñas en los internados. Me daba una penita...
Galletas para ofrendas
Bueno, pues hemos llegado a Orcha y hemos tenido un nuevo guía. Nos hemos quedado nosotras solas para seguir el viaje. Esta vez nos esperaba un toyota todoterreno blanco, inmaculado, de super lujo. Y nosotras como unas señoras....
Lo primero hemos visitado los palacios de Orcha. Eran un poco diferentes, pintados de amarillo, que le daban un tono algo más cálido que aquellos rojizos y pétreos oscuros. El sol ya calienta mucho (tenemos unos 30 grados).
Nuestro guía nos ha acompañado al mercadillo. Es el que me ha gustado más. Parece que la gente no era tan agobiante y me han encantado los colores chillones de los tintes (bueno, no sé si eran tintes o polvos de colores para otras cosas) pero con todo, el ambiente era muy bonito. Curiosamente también hemos podido ver un novio y una novia que salían de la celebración del matrimonio. Un mercader me ha regalado un collarcito y yo pensaba que lo haría para luego vendérmelo o venderme otra cosa pero no, y ha sido un detalle...
Hemos comido de camino a Khajuraho en un palacio precioso. Me he decidido a comer una pasta con un poco de salsa de tomate. Creo que ya estoy mejor y puedo empezar a comer.
Los colores del Mercadillo
Durante el trayecto hemos podido disfrutar de un paisaje algo más frondoso y alegre. El guía me ha pasado unas cuantas canciones indias (algunas tradicionales y otras modernas) para el móvil y nos hemos reído un rato. Era muy divertido porque cada vez que por el camino veíamos algo interesante nos decía: "Mira, por favor, una foto" y a veces no era muy interesante. Por ejemplo, en un momento dado pasamos por  debajo de un árbol con murciélagos colgados y pararon el coche para que hiciéramos fotos. En otro momento dado pararon el coche para que me pudiera hacer una foto con el Betel (árbol sagrado) y cuando me acerqué a él me hechó una bronca porque tenía que quitarme los zapatos!!!
También hemos parado en un horno de pan. Muchos hombres, pero la que trabajaba era una mujer.
Mi compi estaba algo seria porque se ha mareado en el coche y es normal porque a ratos íbamos por una carretera en la que sólo cabe un coche, con camiones que nos venían de frente, adelantando a cada momento, con unos enormes baches... total que han sido horas de "removida".
Hemos llegado a Khajuraho, aun hotel muy moderno de esos con césped, piscina, y muy concienciado con los deportes: pistas de tenis, campo para footing y otras cosas... Hemos ido a dar una vuelta por el jardín porque mi compi estaba mareada y al final se ha puesto enfermísima, vomitando ininterrumpidamente y con mucha diarrea. Al final he tenido que llamar al médico (primero a Madrid, luego Bombay, luego un montón de gente...) Querían que esperásemos a mañana pero yo he insistido y al final, después de tres horas y hablar con mucha gente, ha aparecido el médico: un señor mayor, cariñoso como un abuelito, con su maletín con las medicinas y arropándola en la cama.
Mis hombres del horno de pan (la mujer está trabajando)
Se ha quedado una hora para ver como reaccionaba a la inyección y ha aprovechado para hablar conmigo sobre la sanidad india y la nuestra y el pensamiento indio. Se le vaía contento de poder comentar sus cosas y sobre todo de ver que gente como yo podía pensar que en la India se necesitan cambios para que la gente pueda acceder a la sanidad y a la higiene. A mí me ha servido para practicar mi inglés y darme cuenta de que necesito un buen reciclaje.
Mi compi se ha dormido con un poco menos de fiebre. El médico volverá mañana a primera hora para ver cómo está.
Lástima, con lo que le gusta a ella el ejercicio, no ha podido aprovechar el hotel.
Por cierto, en el hotel había una boda, para variar. Se ve que es la época y como duran una semana... Ha sido curioso que mientras estábamos en la piscina, los invitados nos hacían fotos a nosotras. Lo mismo nos ocurrió en el Taj Mahal y es un poco raro porque yo creo que tienen mucho turismo.

5 de marzo de 2011

7 de Marzo

Templos eróticos de Khajuraho
Después de la visita del médico, que también me ha visto a mí, porque he empezado a tener retortijones de nuevo, hemos visitado los palacios eróticos de Khajuraho. Creo que son muy bonitos pero la verdad es que sólo he visto un pequeño trozo. Me encontraba muy mal, muy cansada y mareada. Creo que me he puesto peor y eso que me estoy tomando un suero oral que me ha dado el médico.
Bacanal
Hemos llegado a Benares y es el ultimo dia en la india. Teníamos una visita en bicishow para ver una ceremonia (más bien un ritual) pero a medio camino me he puesto a vomitar y nos hemos vuelto para atrás. Por cierto, teníamos una nueva guía, esta vez una mujer llamada Sunita. Joven y alegre. Nos ha dicho que era una de las 3 mujeres (entre 100 hombres) que trabaja como guía y que también tenía críos. Le hemos preguntado sobre el trabajo de la mujer en India y ella se consideraba de alguna manera revolucionaria pero las incongruencias de la India nos han mostrado la otra cara: Está casada con un hombre al que no conocía antes de la boda pero que al parecer ahora ama, porque "el amor viene después". Me pregunto si yo sabría vivir de esa manera... Nos hemos perdido la ceremonia pero las chicas nos han dicho que era un montaje y que no valía nada.

Esta vez ha sido mi compi quien se ha tenido que encargar del médico y todas las llamadas hasta que al final ha aparecido. Este era algo más engreido. A mí el médico me quería ingresar tres días en el hospital pero tendría que haber estado mucho peor para valorar una decisión de este tipo. No me podía ni imaginar lo que podía ser un hospital allí.
Cuando me sentía tan mal allí pensaba en toda esa gente que no tiene para comprar medicinas y sufren su dolor en silencio. Curiosos: Estamos en una ciudad donde la gente viene a purificarse pero también donde la gente viene a morir, con lo cual debe estar atestada de gente enferma. Pero la verdad es que por las calles no da ese aspecto.

8 de Marzo

Amanecer en el Ganges

Por la mañana hemos visitado los Ghats de Varanasi. me encuentro algo menjor con las 6 pastillas que me tomo y el "redoxon" (suero oral).
Benarés, como todas las ciudades que hemos visitado, ha resultado enormemente sucia, aunque no tanto como Agra.




Para los Hindús es la ciudad Sagrada por Excelencia y creen que deben visitarla al menos una vez en su vida, y si es mejor, morir allí o al menos tirar las cenizas de su incineración al Ganges.
Es curioso ver como en ese Ganges al mismo tiempo la gente se lava en él, o lava la ropa para su purificación, y al mismo tiempo se tiran las cenizas o se incineran cuerpos.
Los Ghats
Hasta cierto punto llega a ser tan chocante, que una mujer argentina que conocimos luego, creía que todo era un montaje turístico. El paseo en barca al amanecer sí era un montaje pero lo demás no era más que parte de toda la superstición que envuelve los rituales hindús.
He podido ver poco del lugar (excepto los Ghats), las escaleras donde la gente baja a lavarse, porque me he puesto enferma. Las gastroenteritis son normales en India, pero yo llevaba días prácticamente sin comer y al final creo que se me ha revuelto el estómago de ver tanta suciedad.

Hemos cogido el avión hacia Katmandú tras tres horas de cacheos y revisión de maletas.
Nos habían llevado al avión 4 horas antes para el check-in y el embarque ha durado 3 horas!!! pero claro, es que nos han cacheado y revisado el equipaje 4 veces (la última a pie de avión, con militares armados y perros).
Llevando sacos en Katmandú
Yo me paseaba con las piernas flaqueando y mi botella de agua llena de suero. He llorado para que me la dejaran subir al avión. Llorado de verdad, que estaba de un sensiblón horrible, y las mujeres militares que me cacheaban me miraban asustadas, como no sabiendo qué hacer. La verdad, ahora que lo pienso, no he visto a nadie llorar en la India, ni siquiera a algún niño.
A la llegada a Katmandú nos han recibido con un pañuelo de esos que ponen los budistas sobre los hombros en señal de respeto y qu ahora no sé cómo se llama. En este tramo del viaje sólo íbamos a ser nosotras dos. El guía esta vez hablaba mucho mejor español y además era guapísimo.
No teníamos programación hasta el día siguiente así que decidimos ir por nuestra cuenta a ver el Thamel, el barrio de comercios para extranjeros y darnos una vuelta hasta que se fuera el sol.
Nos encantó pasear por el Thamel y ver las mismas ropas que venden aquí, como hechas en la India, y los montones de tiendas de deporte donde tanto te venden imitaciones como ropa original marca Mamut y The North Face pero a un precio super barato.

Nuetro hotel, el Shanker, es el mejor de Kathmandú y eso se notaba en las habitaciones, los alrededores y el servicio. También en que teníamos luz siempre y eso es algo extraño porque en Kathmandú sólo tienen electricidad unas cuantas horas al día. Cuando anochece algunos funcionan con generadores, otros con velitas, otros encienden la luz cuando alguien entra en el comercio, y los muchos, cierran.




Aquí aún hay más caos circulatorio porque hay muchos más vehículos. También me he fijado que hay modelos de coches más modernos y muchas motos tipo scooter, que no se ven en la india, y menos conducidas por chicas.

Bebé Nepalí
 Estamos muy cerca de la India pero la energía ha cambiado mucho. Mi compi y yo estamos como más alegres, más livianas.
India ha sido un cúmulo de contradicciones y Kathmandú parece algo más occidentalizada y aunque eso podría ir en detrimento suyo, parece mantener un cierto equilibrio entre la modernidad, el turismo y el patrimonio de sus monumentos medievales. El mercadillo, muy colorido, menos agobiante porque no nos perseguían los artesanos, pero a la vez se podía regatear menos y lo echaba de menos.

4 de marzo de 2011

9 de Marzo


Palomas protegidas

El día ha amanecido frío y aparentemente lluvioso. Después de nuestro desayuno de tostada y yogur nos hemos visto con el guía y nos ha llevado al centro de Katmandú a ver la Plaza central donde están los antiguos templos y palacios.


Comercio

Creo que dijo que eran del siglo 13, con mucha madera repujada en forma de pagodas. Por fuera todos me parecían bonitos y elaborados pero las ventanas dejan pasar poquísima luz y lo poco que se descubría dentro parecía enormemente oscuro. De vez en cuando encontrábamos templos pequeñitos (de esos con una figura en medio de la calle) y siempre pintados de naranja. Vamos, con un chorro de pintura naranja dada con brocha gorda. Los hace extraños, descuidados y a la vez sucios. Los nepalís, cada vez que pasan por delante de uno, lo tocan para que les de suerte. Además tocan una campana que tienen al lado para avisar al Dios de que están allí y que les escuche.

Santones en Durbar Square

Además de los dioses y diosas tienen esas figuras de aspecto demoníaco que dicen que son dioses protectores y que tienen esa cara para asustar a la gente y proteger a los de la casa.

El guía nos ha explicado que los % de las religiones de Nepal, pero la verdad no me acuerdo. Sé que la mayoría son hindús, luego vienen los budistas y también hay musulmanes y cristianos. Nos ha dicho que ellos tienen un montón de etnias (sherpas, etc...) que cada etnia puede tener su idioma e incluso su religión. El dijo que era "...", que no tienen templos y sólo dos fiestas coincidiendo con los solsticios. Curiosamente hoy era el día de Año Nuevo budista, con una gran fiesta en Bouddhanat, donde ha ido el Dalai Lama, y él no estaba enterado, porque nos ha llevado a una casa de refugiados tibetanos que estaba cerrada por ese motivo.





Bueno, pues en la Durbar Place, que es como se llama la plaza y en la que los turistas tienen que pagar para entrar, hemos visto varios monumentos y también la casa de la Kumari. Eso os lo voy a explicar porque no creo que lo conozcáis. La Kumari es una niña virgen, que es elegida democráticamente (presentada por sus padres) para representar la reencarnación de la Diosa Madre (no me hagáis repetir el nombre, pues no me acuerdo). Una vez elegida la niña en cuestión, la encierran en una casa con gente que la cuida y un instructor y permanece allí hasta que tiene su primera regla. Está todo el día allí metida (casi a oscuras en esas casas) y sale a la ventana a petición de la gente que va a verla y le pide su bendición. Ya os podéis imaginar, la niña, con una cara de "a mí que me importa), sale de vez en cuando al balcón para que la vean unos segundos. Me pareció horrible... pro se ve que tiene devotos.
Durante la visita se ha puesto a llover y hacía bastante fresco, aunque íbamos abrigadas.

En la estupa de Swayambhunath

Aquí también dejan a las palomas ir a su aire y meterse donde más les apetece, además de darles de comer, con el consiguiente deterioro de calles y edificios. Nos ha comentado el guía que no comen vaca pero los búfalos sí. Curioso. Y otra cosa curiosa es que en kathmandú hay muchos perros en la calle, todos de aspecto parecido, pero están como aletargados. Siempre se les ve adormecidos y tirados en la calle. Ninguno corre, ni juega, ni anda...

Hemos comido en el centro, una pasta sin nada con lassi de banana y esta vez el guía no ha comido con nosotras. Se ha sentado con amigos suyos. Una argentina sentada a nuestro lado se quejaba de su viaje y de que todo le parecía un montaje turístico. A mi no me lo parecía tanto pero cada uno se queda con lo que quiere.

Por la tarde hemos ido a la Estupa de Swayambhunat, que está en una colina desde donde se ve todo el valle de Kathmandú. Lástima que estaba un poco tapado y no se podían ver las montañas nevadas. El sitio es bastante bonito. Lleno de monos, también, pero bastante limpio.



Delante de la estatua de Buda la gente depositaba ofrendas, que podían ser dinero o comida. Lo de la comida lo hemos visto durante todo el viaje y la verdad es que no lo entiendo mucho. La gente ofrece comida y luego esa comida la tienen que tirar, cuando hay tanta gente que pasa hambre. En el único sitio que se aprovechaba era en el templo Sikh de Delhi, en el que a la salida te daban un pastelillo que era el mismo que la gente lleva en ofrenda.

Vistas de la plaza desde el Restaurante

en Nepal, el guía nos ha contado que aún se hacen sacrificios de animales y se untan algunos templos con sangre. Más ancestral, imposible.

Hemos comprado incienso, bastante incienso pero teníamos que haber traído menos ropa y una maleta grande, para poder comprar más cosas, que la verdad es que están muy baratas.